En este emocionante proyecto de remodelación, nos enfrentamos al reto de transformar dos casas adosadas situadas entre medianeras en una residencia única y cohesionada. Cada una de estas casas contaba con su propia escalera, ascensor, entrada independiente y patio interior, lo que planteaba un desafío considerable en términos de diseño y ejecución.
La clave para el éxito de este diseño era conseguir una buena integración de dos viviendas separadas en un solo espacio armonioso. Afortunadamente, contábamos con un generoso espacio físico que nos brindaba la oportunidad de crear una distribución sumamente espaciosa y funcional en todas las áreas de la casa.
Uno de los aspectos más destacados de esta reforma es, sin duda, la abundante entrada de luz natural en cada rincón de la vivienda. Este logro se alcanzó gracias a la apertura estratégica del patio interior que se encontraba en el corazón de la estructura, que dio luz a los pasillos distribuidores interiores de la vivienda. Al eliminar las barreras visuales y permitir que la luz fluyera libremente, conseguimos crear una atmósfera luminosa y acogedora en todo el espacio habitable.
Este proyecto no solo representa un triunfo en términos de diseño y ejecución, sino que también se traduce en una residencia excepcionalmente cómoda y funcional para sus habitantes. La unificación de las dos casas adosadas no solo ha maximizado el espacio, sino que también ha añadido un toque de modernidad y elegancia a la propiedad, convirtiéndola en un hogar verdaderamente único y deseado. Estamos orgullosos de haber contribuido a la realización de este sueño residencial, y esperamos que esta vivienda sea disfrutada y apreciada durante generaciones venideras.
